tag:blogger.com,1999:blog-729932651233982635.post6751892215936656038..comments2023-05-25T11:44:47.197+02:00Comments on Es desclou la tenebra...: Escapatòria (o Sentència monòtona)[Minicrida#040 - No puc més… Se’ns ha escapat!]deomiseshttp://www.blogger.com/profile/00155917828135573960noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-729932651233982635.post-54794744345982378032015-03-15T00:55:30.772+01:002015-03-15T00:55:30.772+01:00Escapatoria (o Sentencia monótona)
La anciana en...<b>Escapatoria (o Sentencia monótona)</b><br /><br /><br />La anciana encuentra el loro en la barandilla de su balcón. Se acerca y el pájaro no hace ningún movimiento para huir. Se le ve exhausto, deshidratado. Lo examina y no le ve ninguna placa identificativa que le dé pistas de quien puede ser su dueño. Con una voz estridente, repite de forma monótona unas palabras que no parecen regirse por la lógica. <i>No puedo más... Se nos ha escapado!</i>, lo pronuncia con una mezcla de ruidos típicos de esta especie de animales. Es la banda sonora que escucha mientras rebusca en la habitación de los trastos. Recuerda que sus nietos guardaron allí una jaula, tras la muerte del último de los periquitos que tanto le gustaba criar a su marido. Pero ni unos ni otro la acompañan ya. Es por esta razón que la inesperada visita la alegra, en parte. La encuentra cubierta por una sábana blanca, le quita el polvo y, como ve que el animal no se asusta, le abre la portezuela por si le gusta la idea de ser su inquilino.<br /><br />Por la tarde, le irá a comprar alpiste y una jaula más adecuada para su medida. Ahora, entre la fruta y el agua que le deje, podrá pasar sin. El loro continúa repitiendo la secuencia de palabras sin pausa ni variación, dentro de la jaula y sin sentirse extraño. Ella nunca sabrá que los anteriores dueños maltrataban al pájaro por ser tan repetitivo y con una obsesión tan marcada para la emulación, ni que la mujer, harta de la mascota, pronunció las tres primeras palabras<b>*</b>. Tampoco que el episodio continuó con un intento de ahogarlo dentro de la bañera, que el loro esquivó con pericia y un pico resistente y belicoso. Y que, antes de esconderse debajo de la cama, el hombre dijo las tres palabras últimas<b>**</b>. Su cerebro las memorizó y sus ojos detectaron la ventana entreabierta. La vía libre para la escapatoria ya estaba servida.<br /><br />Dentro de la jaula, que aún atufa a periquito, se promete medir esta garganta suya y cambiar más a menudo su repertorio lingüístico, para que la anciana no se harte de su compañía. Por muy paciente que parezca...<br /><br /><br />d.<br /><br /><br /><b>Se sobreentienden los asteriscos *=No puedo más...; **=Se nos ha escapado!</b>deomiseshttps://www.blogger.com/profile/00155917828135573960noreply@blogger.com