tag:blogger.com,1999:blog-729932651233982635.post1912311831542510792..comments2023-05-25T11:44:47.197+02:00Comments on Es desclou la tenebra...: Penúries i injustícies (o Llòbrega)(Relats conjunts)deomiseshttp://www.blogger.com/profile/00155917828135573960noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-729932651233982635.post-15735722062924461032015-03-28T18:19:57.428+01:002015-03-28T18:19:57.428+01:00Penurias e injusticias (o Lóbrega)
En silencio, ...<b>Penurias e injusticias (o Lóbrega)</b><br /><br /><br />En silencio, pide disculpas a la niña por no mirarla a los ojos. La voz ante el telar, con las minúsculas manos poco acostumbradas a la lanzadera, abducida por la atención que presta a la pieza que teje porque no quiere errar la trama correspondiente a esta urdimbre. Debe haber cumplido los doce años, como mucho, y se la ve tan empeñada en lo que hace que le provoca una tristeza callada. Le cambia la expresión pero nadie lo notaría a simple vista. También la mira con atención y lo primero que le viene a la mente es decirle unas palabras de aliento, rogarle que descanse un rato, que ya la sustituirá y que disfrute de la muñeca que ha dejado huérfana en su casa. Es cierto, hay que ganarse el pan con el sudor de la frente, pero también hay que ser niño y crecer entre juegos y juguetes. Piensa en su ropa. ¿Cuántas manos pequeñas y delicadas como las de ella han debido hacer falta para la blusa, los pantalones, la chaqueta... todo lo que lleva puesto?<br /><br />En silencio, la observa y reconoce que los tiempos no han cambiado, que en cualquier rincón del planeta están las inclemencias y las injusticias de un mercado que explota a niños inocente, para que la clase privilegiada del primer mundo de Occidente se vista y no quiera darse cuenta de ciertas diferencias que son plausibles. Constantemente, emitirán reportajes de denuncia de la explotación infantil, de las mafias, la trata de blancas... Se indignará por ver esta realidad, pero sobre todo porque es justamente a la hora de la cena o en medio del telediario del mediodía, mientras almuerza. Si no, será un anuncio de Oxfam Intermón, para erradicar el hambre en cualquier aldea de África. Y sentirá la culpabilidad efímera de tener algo que llevarse a la boca. También podrá verse interrumpida una comida con un derrumbe de un edificio textil en medio de Bangladesh. Por poner un ejemplo reciente... Y tendrá remordimientos de haber adquirido prendas de las marcas que importan los productos de ese país asiático. Pero en cuestión de minutos se olvidará de aquellas imágenes y seguirá con la espera de las rebajas que procedan. Ya sea las de enero o las de agosto.<br /><br />En silencio, baja la mirada, tan lóbrega como la atmósfera retratada en la pintura, y lee la placa del cuadro.<br /><br /><i><b>La pequeña obrera (c. 1885)</b><br />Joan Planella y Rodríguez (1849-1910)<br />Óleo sobre lienzo<br />182 cm x 142 cm<br />MHCAT 4204, Barcelona</i><br /><br />Deja atrás aquella fábrica y continúa la visita al Museo de Historia de Catalunya. Se ha convencido de que hay gente que sufre más antes de catar la amargura de la edad adulta. Incluida en el precio de la entrada del Museo, hay la comprensión de que sus problemas matrimoniales pueden solucionarse con una separación o un divorcio, y no es necesario exagerar. No hay mal que dure cien años...<br /><br /><br />d.deomiseshttps://www.blogger.com/profile/00155917828135573960noreply@blogger.com